El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha subrayado este domingo la independencia de su nación al gestionar los recientes desarrollos en la Franja de Gaza, incluyendo el análisis del actual alto el fuego y la potencial introducción de una fuerza internacional.
Netanyahu ha reaccionado enérgicamente ante las especulaciones de los medios de comunicación de Israel y Estados Unidos, que sugerían una subordinación con su principal aliado internacional. Un reporte del Canal 12 de la televisión israelí reveló que Steve Witkoff, enviado de Trump, ha recomendado a Israel no condicionar la entrega de ayuda humanitaria a la devolución de los restos de los rehenes israelíes por parte de Hamás.
“Hemos presenciado afirmaciones ridículas sobre las relaciones entre Estados Unidos e Israel. Cuando estuve en Washington, se decía que controlo al Gobierno estadounidense y que dicto su política de seguridad. Ahora afirman lo contrario. Y nada de esto es cierto”, declaró Netanyahu.
“Israel es un país independiente, Estados Unidos es un país independiente. Nuestra relación es de socios, y esta colaboración ha alcanzado un máximo histórico”, afirmó el mandatario.
Además, Netanyahu ha reiterado que Israel mantendrá el control sobre su política de seguridad. “Está en nuestras manos”, expresó, “y responderemos a nuestra discreción sin pedir la aprobación de nadie”.
Esta firme posición también se aplica al eventual envío de tropas internacionales a Gaza, cuya composición aún está bajo discusión. “Hemos dejado claro que Israel determinará qué fuerzas son inaceptables para nosotros, y así es como operamos y seguiremos operando, y así es como también lo ha aceptado Estados Unidos”, aseguró.
“Nos defenderemos por nuestra cuenta”, concluyó Netanyahu, “y seguiremos controlando nuestro propio destino”.