El ejecutivo nigeriano, a través de su ministro de Exteriores, Yusuf Tuggar, ha enfatizado en Berlín que no se tolerará ningún tipo de persecución religiosa en el país, asegurando que existe un ‘compromiso constitucional’ con la libertad de culto. Esta declaración llega después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, sugiriera la posibilidad de una intervención militar debido a la violencia contra cristianos por parte de grupos islamistas radicales.
‘Es imposible que una persecución religiosa sea apoyada de ninguna forma, tipo o manera por parte del Gobierno de Nigeria, a cualquier nivel’, afirmó Tuggar, subrayando el compromiso de Nigeria con el Estado de derecho y la libertad religiosa.
Además, Tuggar ha alertado sobre los riesgos de fragmentar a Nigeria en líneas religiosas y ha hecho un llamado a la comprensión internacional para evitar un conflicto similar al de Sudán, citando la reciente guerra civil en ese país, según informaciones de Channels TV.
Por otro lado, Bayo Onanunga y Daniel Bwala, voceros del presidente nigeriano Bola Tinubu, han comunicado que el gobierno está abordando activamente los desafíos de seguridad y que se anticipa un encuentro entre Tinubu y Trump para resolver desavenencias.
Aunque los cristianos han sido frecuentemente atacados, análisis indican que la mayoría de las víctimas de violencia armada en Nigeria son musulmanes, especialmente en el norte del país, donde predominan grupos como Boko Haram y el Estado Islámico en África Occidental (ISWA).
