Nueve individuos fueron secuestrados y asesinados luego de que individuos armados interceptaran dos autobuses en Baluchistán, al oeste de Pakistán, incidente que fue reivindicado por el Ejército de Liberación Baluche (BLA) como un acto terrorista.
El subcomisario de la Policía de Zhob, Navid Alam, confirmó que ‘nueve personas secuestradas en ambos autobuses han sido asesinadas y sus cuerpos han sido recuperados’. Un superviviente relató que tras el secuestro, los atacantes permitieron que los autobuses prosiguieran su camino.
Según informes del periódico ‘Dawn’, los atacantes bloquearon la vía y detuvieron los vehículos, revisaron los documentos de identidad de los pasajeros y secuestraron a nueve de ellos, quienes eran aparentemente oriundos de la provincia de Punyab.
El presidente de Pakistán, Asif Alí Zardari, condenó el ataque diciendo que ‘esta barbaridad es parte de la conspiración maligna de Fitna al Hindustan para derramar sangre en Pakistán’ y reafirmó el compromiso del gobierno de erradicar a estos grupos terroristas junto con sus colaboradores.
El primer ministro Shehbaz Sharif, aseguró que las fuerzas de seguridad ‘responderán a los terroristas con toda la fuerza’ y prometió que ‘la sangre de los inocentes será vengada’. Por su parte, el ministro principal de Baluchistán, Sarfraz Bugti, calificó el incidente de ‘terrorismo’ y denunció el asesinato de civiles basado en su identidad paquistaní como un ‘crimen imperdonable’.
Bugti destacó que los terroristas ‘no son seres humanos, sino bestias cobardes’ y afirmó que el gobierno no permitirá que estos criminales se oculten. ‘Todas las redes terroristas que respaldan a Fitna al Hindustan serán destruidas’, concluyó.
En los últimos meses, Pakistán ha visto un aumento en los ataques, principalmente de Tehrik-i-Talibán Pakistan (TTP) y grupos separatistas baluches como el BLA, que buscan mayor autonomía o independencia para la provincia. La violencia se ha centrado en Jíber Pastunjua y Baluchistán.