El recuento de víctimas mortales debido a las recientes inundaciones en Tailandia ha escalado a más de cien, confirmaron las autoridades de seguridad este viernes.
En declaraciones al periódico ‘Khaosod’, el portavoz de la Policía, Trairong Phiwephan, ha señalado que hasta ahora se han contabilizado 104 fallecidos, los cuales están siendo identificados por las autoridades competentes.
La ciudad de Hat Yai, un crucial centro comercial en el sur del país, ha sido una de las más afectadas, con más de 30.000 personas perjudicadas por las fuertes lluvias.
Los servicios de rescate han enfrentado ‘inmensas dificultades’ en sus operaciones, especialmente en el manejo de los cuerpos de las víctimas, según han alertado.
A pesar de esto, el Gobierno aún sostiene que el número oficial de fallecidos es de 85, cifra que no se ha modificado desde el jueves, según explicó Siripong Angkaskulkiat, del Centro de Operaciones de Emergencias ante Inundaciones de Bangkok. Esta discrepancia ha generado críticas por parte de los equipos de emergencia, quienes acusan a las autoridades de minimizar la magnitud del desastre.
El martes, el Gobierno declaró la provincia de Songkhla como ‘zona de desastre’, una medida que ha permitido desbloquear fondos y proporcionar ayuda de emergencia a los afectados. Estas tareas están siendo dirigidas por el jefe del Ejército, Ukrit Buntanont, con el apoyo de diversos ministerios.
