La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha expresado su rechazo a la orden de evacuación impuesta por Israel para la ciudad de Gaza, ubicada al norte de la Franja, y ha declarado que sus equipos seguirán en el lugar a pesar de la intensificación del ataque israelí, que pretende tomar control de la región, hogar de aproximadamente un millón de habitantes.
“La OMS está consternada por la última orden de evacuación, que exige que un millón de personas se trasladen de la ciudad de Gaza a una llamada ‘zona humanitaria’ en el sur designada por Israel”, afirmó Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general del organismo, en un comunicado.
“La zona no tiene el tamaño ni el tipo de servicios necesarios para apoyar a los que ya están allí, mucho menos para nuevas llegadas. Esto incluye la cobertura sanitaria”, continuó, destacando además que “casi la mitad de todos los hospitales funcionales (en la Franja) están en la ciudad de Gaza”.
Asimismo, mencionó que “esto incluye el 36 por ciento de todas las camas hospitalarias y el 50 por ciento de las camas en unidades de cuidados intensivos”. “El dañado sistema de salud no puede permitirse perder ninguna de las instalaciones que quedan”, añadió en su comunicación en la red social X.
“Mientras aumenta la violencia, los hospitales en la ciudad de Gaza están bajo una presión inmensa. Se han convertido una vez más en una enorme sala para traumatología, saturada por el flujo de heridos y la escasez de camas y suministros críticos”, lamentó.
Pese a la situación, reiteró a la población civil que “la OMS y sus socios siguen en la ciudad de Gaza” y exhortó a la comunidad internacional a “actuar”. “Pidan un alto el fuego inmediato. Pidan que se respete el Derecho Internacional Humanitario, incluida la liberación de los rehenes y los detenidos de forma arbitraria”, solicitó.
“Pidan que se facilite un acceso sin restricciones a la ayuda vital y a los servicios esenciales a la escala necesaria”, enfatizó, en alusión a las severas restricciones impuestas por el Gobierno de Israel a la entrega de ayuda humanitaria a los palestinos en el enclave costero en el marco de su ofensiva.
“Pedimos la protección del sistema sanitario, de los trabajadores humanitarios y de los civiles. Esta catástrofe está causada por el hombre y la responsabilidad recae sobre todos nosotros”, concluyó Tedros en su comunicado, en un contexto de crecientes críticas internacionales hacia las acciones de Israel, que incluyen un llamado a la población a abandonar la ciudad, considerado por muchos como un desplazamiento forzoso.
La ofensiva israelí, iniciada tras los ataques del 7 de octubre de 2023 por varias facciones palestinas, ha resultado en más de 64.600 palestinos fallecidos, según autoridades de Gaza, en medio de denuncias internacionales sobre las operaciones del Ejército de Israel en el enclave, especialmente en relación al bloqueo en la entrega de ayuda.