La devastadora explosión del pasado viernes en una instalación de pólvora en la región de Riazán, ubicada al sur de Moscú, ha incrementado el número de víctimas mortales a once, de acuerdo con las últimas cifras proporcionadas este sábado por el Ministerio de Emergencias.
Según fuentes oficiales, aproximadamente 130 individuos sufrieron heridas debido al incidente. Los equipos de rescate, apoyados por maquinaria pesada y unidades caninas especializadas en búsqueda, continuaban este sábado extrayendo restos de las ruinas de la fábrica.
En un comunicado a través de Telegram, el gobernador de la región, Pavel Malkov, ha proclamado «un día de luto» este próximo lunes para honrar a las víctimas de esta «terrible tragedia» en el distrito de Shilovski, sin que hasta el momento se hayan esclarecido las causas del siniestro.