Volker Turk, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, ha expresado preocupación este miércoles por la creciente represión hacia la oposición y los periodistas en Uganda, especialmente con vistas a las elecciones generales de enero de 2026. Ha urgido a las autoridades a salvaguardar los Derechos Humanos antes, durante y después de los comicios.
Desde la oficina de Turk, han reportado que, en lo que va de año, se han detenido a al menos 550 personas, incluidos miembros y simpatizantes de la Plataforma de Unidad Nacional (NUP), con más de 300 arrestos desde el comienzo de la campaña electoral en septiembre.
Se ha informado que muchos detenidos aún están bajo custodia enfrentando acusaciones que incluyen alteración del orden público, desobediencia y provocación de violencia, mientras las fuerzas de seguridad intensifican su presencia en los eventos de la NUP y su líder, Robery Kyagulanyi, más conocido como Bobi Wine. Durante estas concentraciones, las autoridades han utilizado gases lacrimógenos, látigos, porras y cañones de agua, provocando numerosos heridos y fuertes críticas de la oposición.
«Es profundamente lamentable que las campañas electorales se hayan visto una vez más marcadas por los arrestos arbitrarios generalizados, las detenciones y el uso de fuerza innecesaria o desproporcionada contra la oposición, así como por restricciones indebidas de la libertad de prensa», destacó Turk.
«Pido a las autoridades ugandesas que pongan fin al uso de estas tácticas represivas para permitir a los ugandeses ejercer de forma total y pacífica su derecho a participar en los asuntos públicos de su país durante el día de las elecciones y en los posteriores», añadió.
Además, se ha denunciado un incremento en arrestos, desapariciones forzosas, torturas y malos tratos contra opositores y activistas en el último año, incluyendo el uso de vehículos sin identificación, conocidos como «drones», para transportar a detenidos a centros no oficiales.
«Insto a las autoridades ugandesas a que investiguen de forma completa e imparcial todas las denuncias de desaparición forzada, arresto y detención arbitrarios y tortura o malos tratos, castiguen a los responsables y proporcionen una reparación integral a las víctimas», señaló Turk, instando también al fin de esta represión y la liberación de todos los detenidos de forma arbitraria.
Por último, ha solicitado que se respete la libertad de expresión tras la retirada de acreditaciones a periodistas de NTV y ‘The Daily Monitor’, y los ataques a más de 30 periodistas y trabajadores de medios durante unas elecciones parciales en marzo en Kawempe Norte. «Las autoridades ugandesas deben poner fin a toda violencia contra los medios de comunicación y la oposición y actuar plenamente de conformidad con sus obligaciones en virtud del Derecho Internacional de los Derechos Humanos», concluyó Turk.
El presidente de Uganda, Yoweri Museveni, en el poder desde 1986, buscará extender su mandato en las elecciones de enero, en un contexto marcado por crecientes denuncias de represión. Bobi Wine, por su parte, ha señalado irregularidades en las elecciones pasadas y ha rechazado reconocer su derrota, acusando al presidente de manipulación electoral.