La Organización de las Naciones Unidas ha instado a «frenar la violencia» y «propiciar la justicia» en Colombia a raíz de los atentados que ocasionaron la muerte de cerca de 20 individuos este jueves. Los ataques se llevaron a cabo cerca de una instalación militar en Cali, Valle del Cauca, y en Amalfi, Antioquia, ubicados ambos en la región occidental del país.
«Condenamos firmemente los hechos de violencia ocurridos hoy en Cali y Amalfi. Nuestra solidaridad con las víctimas y sus familias», expresó la misión de la ONU para Colombia mediante un comunicado oficial.
Además, enfatizó la necesidad de «proteger a la población» y de asegurar una «actuación judicial» efectiva para que los culpables de estos crímenes no permanezcan impunes. Hasta ahora, los atentados reportan seis y doce fallecidos, respectivamente.
Por su parte, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, declaró que ya se ha arrestado a un miembro del Estado Mayor Central (EMC), un grupo disidente de la disuelta guerrilla de las FARC, acusado de participar en el ataque de Cali.