En un reciente operativo policial en el suroeste de Brasil, específicamente en el estado de Rondonia, la Policía Militar se vio involucrada en un incidente que terminó con la vida de dos personas. Estos individuos, parte de un grupo de campesinos sin tierra, fueron abatidos durante el proceso de desalojo de cuatro fincas que habían sido ocupadas.
Según informes de la Policía Militar, los fallecidos intentaron evadir un control de seguridad en un vehículo, lo que desencadenó una persecución a alta velocidad. Durante el enfrentamiento, los pasajeros del vehículo dispararon contra los oficiales, quienes respondieron al fuego, resultando en la muerte de los dos campesinos. En el lugar, se confiscaron armas de fuego, munición y teléfonos móviles.
Por otro lado, representantes de la Comisión Pastoral de Tierras (CPT) han contradicho esta versión, alegando que no hubo provocación por parte de los campesinos en el tiroteo. La Policía Militar defendió su actuación mencionando que «La conducta de los implicados, al desobedecer órdenes legítimas y disparar contra agentes públicos, representó un grave riesgo para la comunidad y el orden público, justificando la intervención de la guarnición».
Las fincas en cuestión son propiedad del grupo Nelore Di Genio, fundado por João Carlos Di Genio, un prominente empresario en el sector educativo del país, ya fallecido.










