El primer ministro húngaro, Vitkor Orbán, ha celebrado este jueves el nuevo plan de seguridad de Estados Unidos, resaltando que incorpora varias de las ideas que él mismo lleva tiempo defendiendo en Europa sin, a su juicio, obtener la atención que merecían. “Lo que se siembra, se cosecha”, ha afirmado.
Orbán se refiere a la nueva Estrategia de Seguridad Nacional presentada por la Casa Blanca la semana pasada, un documento que marca las grandes directrices de la política exterior de la Administración de Donald Trump. A su entender, Washington ha sabido identificar “el largo callejón sin salida económico” en el que se encuentra una Europa “débil” y en la que “tampoco se puede confiar”.
En su cuenta de X, el dirigente húngaro ha subrayado que los responsables estadounidenses “también han visto la crisis de civilización de Europa. Han visto que los valores de la civilización europea, la democracia y el libre mercado están en peligro”.
En la misma línea, Orbán ha aplaudido que en Washington se haya asumido que fue un “error” que los “liberales europeos” se dedicaran en los últimos años a deteriorar los vínculos con Moscú y que ahora se vea necesario recomponerlos sobre bases estratégicas.
Según el primer ministro húngaro, “Estados Unidos comprende con precisión el declive de Europa. Ven el declive a escala de la civilización contra el que en Hungría llevamos quince años luchando. Por fin, no luchamos solos”, ha remarcado.
La semana pasada, la Casa Blanca dio a conocer su nueva estrategia de seguridad nacional, centrada en el objetivo de restaurar el liderazgo de Estados Unidos en Occidente. Se trata de una especie de nueva Doctrina Monroe con la que Washington aspira a recuperar influencia mediante el uso combinado de su poder económico y militar.
En el capítulo dedicado a Europa, el documento fija como “prioritario el restablecimiento de las relaciones estratégicas con Rusia” y alerta del supuesto “borrado” que, según advierte, estaría afectando en estos momentos a la “civilización europea”.











