Suecia, Dinamarca y Noruega han decidido este martes participar en la adquisición de armamento estadounidense destinado a Ucrania, con una inversión total de 500 millones de dólares que se utilizará para comprar equipo militar y munición para las fuerzas armadas ucranianas.
La OTAN ha confirmado que estos países se unen a la iniciativa de Países Bajos, que el lunes anunció una inversión similar para proporcionar material bélico a Kiev. Esta estrategia busca compensar la reducción de la ayuda de Estados Unidos a Ucrania y aumentar la participación de los aliados en el soporte a Kiev.
«Desde los primeros días de la invasión a gran escala de Rusia, Dinamarca, Noruega y Suecia han mantenido un apoyo inquebrantable a Ucrania. Felicito a estos aliados por sus rápidos esfuerzos para poner en marcha esta iniciativa», declaró el secretario general aliado, Mark Rutte.
El ex primer ministro neerlandés destacó que este apoyo contribuirá a fortalecer la posición de Ucrania y a disuadir futuras agresiones mientras busca una paz sostenible.
Con la adición de estos países, el total de fondos comprometidos en esta ronda de financiación alcanza los 1.000 millones de dólares. Alemania también ha anunciado que entregará dos sistemas adicionales de defensa ‘Patriot’ a Ucrania, como parte de un acuerdo con Estados Unidos.
La OTAN facilitará la entrega de estas armas a través de su nueva iniciativa PURL, que coordina el suministro de equipo adquirido a Estados Unidos y se integra en la misión de asistencia y capacitación a Ucrania, NSATU.
En una reciente visita a la Casa Blanca, Rutte mencionó que Reino Unido, Canadá y Finlandia también mostraron interés en unirse a esta iniciativa, después de que Donald Trump anunciara que la ayuda militar estadounidense se canalizaría a través de compras realizadas por los aliados europeos de la OTAN.
Rutte ha comunicado a «todos los aliados de la OTAN» la importancia de contribuir a esta iniciativa de distribución de responsabilidades en el apoyo a Ucrania.