Este miércoles, el Parlamento Europeo ha solicitado un cambio hacia un modelo deportivo más inclusivo, donde tanto aficionados como atletas tengan voz y voto en las decisiones de las federaciones nacionales e internacionales, así como en los clubes y ligas nacionales. Esta iniciativa surge como respuesta a la reciente aprobación de la UEFA que permite a las ligas española e italiana organizar partidos fuera de sus fronteras, acentuando el caso de LaLiga que planea llevar a cabo el próximo encuentro entre el Villarreal CF y el FC Barcelona en Estados Unidos.
La Eurocámara ha expresado su rechazo a esta práctica, instando a los organismos deportivos a “impedir que los partidos de competiciones nacionales se disputen en el extranjero”. Además, ha destacado la necesidad de aumentar la transparencia y la rendición de cuentas en las federaciones, promoviendo la participación de mujeres y personas con discapacidad.
Se pone especial énfasis en abordar problemas de corrupción, dopaje, manipulación de partidos y piratería de transmisiones, criticando también la “excesiva comercialización” de los eventos deportivos. Los eurodiputados han solicitado a la Comisión Europea que supervise estos desafíos y evalúe el impacto de las inversiones extranjeras en la integridad financiera del deporte europeo.
