Patrice Talon, el actual presidente de Benín, ha asegurado recientemente que no buscará reelegirse para un tercer periodo, que sería inconstitucional, y abandonará la presidencia en las próximas elecciones, marcando el fin de sus diez años de gobierno.
Desde que asumió el cargo en 2016, Talon ha fortalecido su liderazgo gracias a la estabilidad económica del país, aunque Amnistía Internacional ha criticado un incremento en la represión a los adversarios políticos, destacando un nuevo código electoral que impone significativas restricciones a la participación.
Durante un discurso a la nación el viernes pasado, en el contexto del 65° aniversario de la independencia de Benín de Francia, Talon expresó: He llegado al límite de mis esfuerzos, mi imaginación y mi reflexión. He obrado con buena fe, aunque a menudo me he equivocado. Como no soy Dios, pido a los benineses que me perdonen y crean en nuestro destino común, según informes de ‘La Nouvelle Tribune’. Se debe recordar que la legislación de Benín limita la presidencia a dos mandatos de cinco años cada uno.
Actualmente, tanto el gobierno como la oposición no han designado aún a sus candidatos para las elecciones del próximo año. Entre los nombres que circulan como potenciales aspirantes del oficialismo están Romuald Wadagni, ministro de Finanzas, y Joseph Djogbénou, líder de la Unión Progresista para la Renovación. Por otro lado, la oposición, especialmente el partido Los Demócratas liderado por el ex presidente Thomas Boni Yayi, continúa en conversaciones para unificar su representación.