El presidente checo, Petr Pavel, ha instado al partido ANO, ganador de las recientes elecciones legislativas, a nominar un nuevo candidato para el puesto de primer ministro, debido a las controversias de interés que rodean a Andrej Babis, actual líder del partido. ‘Si el líder de ANO, Babis, no es capaz de resolver satisfactoriamente su conflicto de interés, entonces al nombrarle estaría contribuyendo a la creación de una situación ilegal’, afirmó Pavel en una transmisión de la emisora pública del país. Pavel sugirió que, como ganadores de las elecciones, sería prudente para ANO presentar otra opción para el cargo.
Pavel recordó el dilema de Babis con Agrofert, el principal consorcio agroindustrial del país, del cual es dueño. Al ser nombrado primer ministro, Babis tendría 30 días para solventar este conflicto. Aunque Babis indicó la semana pasada que revelaría su plan para abordar el conflicto justo antes de su nombramiento, su partido ha rechazado la posibilidad de que venda Agrofert.
En República Checa, una ley vigente desde años atrás restringe la influencia de políticos sobre entidades beneficiarias de fondos públicos o europeos. Durante su mandato anterior, Babis enfrentó problemas similares, que intentó resolver mediante la transferencia de acciones a fideicomisos, aunque recientemente confirmó que había retomado la propiedad completa del grupo.











