El Programa Mundial de Alimentos (PMA) ha expresado su repudio este domingo ante un ataque perpetrado por el Ejército israelí contra palestinos cerca de un convoy de 25 camiones cargados de ayuda que ingresó a la Franja de Gaza, criticando a Israel por no cumplir con sus ‘garantías’ de no intervenir en las rutas de los convoyes humanitarios.
‘En la mañana del 20 de julio, un convoy del PMA de 25 camiones que transportaba ayuda alimentaria vital cruzó el puesto fronterizo de Zikim con destino a las comunidades hambrientas del norte de Gaza. (…) A medida que el convoy se acercaba, la multitud (de civiles) que lo rodeaba se vio bajo el fuego de tanques israelíes, francotiradores y otros disparos’, relató el PMA en su cuenta de la red social X, manifestando una ‘profunda preocupación y tristeza’ por el incidente ‘trágico’.
El comunicado del PMA también informó sobre la peligrosidad creciente para las operaciones humanitarias, señalando que solo ese día, al menos 73 individuos perdieron la vida y 150 resultaron heridos en ataques israelíes mientras esperaban ayuda en los puntos de la Fundación Humanitaria para Gaza (GHF), con la mayoría de las muertes registradas en el norte de Gaza, según cifras de autoridades locales.
El PMA responsabilizó a Israel por los ataques: ‘El violento incidente de hoy se produce a pesar de las garantías de las autoridades israelíes de que las condiciones de las operaciones humanitarias mejorarían; entre ellas, que las Fuerzas Armadas no estarán presentes ni intervendrán en ningún momento a lo largo de las rutas de los convoyes humanitarios’. Además, reiteró el llamado a que ‘nunca, nunca, debe haber grupos armados cerca o en nuestros convoyes de ayuda’ y exigió que ‘los tiroteos cerca de las misiones humanitarias (…) cesen de inmediato’ y condenó cualquier violencia contra civiles en busca de ayuda como ‘completamente inaceptable’.
El PMA también destacó la labor de los cooperantes que brindan ‘asistencia vital’ y subrayó los riesgos a los que se enfrentan. ‘Los equipos del PMA que acompañan a los convoyes no deberían tener que arriesgar sus propias vidas para salvar otras. Sin estas condiciones fundamentales, no podemos seguir prestando ayuda vital en toda la Franja de Gaza’, afirmaron.
Finalmente, el PMA hizo un llamamiento para un ‘aumento masivo de las distribuciones de ayuda alimentaria’ y apeló a un acuerdo de alto el fuego largamente esperado, que debería facilitar un suministro ‘de alimentos críticos de forma coherente, predecible, ordenada y segura’ a los habitantes de Gaza. Según el gobierno de Gaza, casi 1.000 personas han muerto y 6.011 han sido heridas en incidentes cerca de los puntos de distribución de la Fundación Humanitaria para Gaza (GHF), los cuales son considerados ‘trampas mortales’.