El ejército polaco ha decidido suspender indefinidamente las operaciones de sus aviones F-16, con la única excepción de las misiones operativas, tras un trágico accidente ocurrido el pasado jueves. Durante unas prácticas de entrenamiento, previas a una exhibición aérea, una de estas aeronaves sufrió un siniestro.
El coronel Marek Pawlak, portavoz de las Fuerzas Armadas, indicó que los únicos vuelos permitidos serán aquellos necesarios para la defensa del territorio y del espacio aéreo de Polonia, tal como reporta la agencia estatal PAP.
Por su parte, el ministro de Defensa, Wladyslaw Kosiniak-Kamysz, confirmó que se han iniciado las investigaciones pertinentes para determinar las causas del accidente que resultó en la muerte del mayor Maciej Krakowian, distinguido piloto de la Fuerza Aérea polaca.
El trágico suceso tuvo lugar la noche del jueves, mientras Krakowian participaba en un entrenamiento para un evento aéreo que se celebraría en Radom, a unos cien kilómetros de Varsovia.
Diversos líderes políticos de Polonia, incluyendo al presidente Karol Nawrocki y al primer ministro Donald Tusk, han expresado sus condolencias tras el accidente.











