El primer ministro de Polonia, Donald Tusk, ha confirmado que no procederá la extradición a Alemania del ucraniano implicado en el sabotaje al gasoducto Nord Stream en septiembre de 2022, y ha criticado duramente la cooperación de Alemania con Rusia en la construcción de dichas infraestructuras.
Durante una conferencia de prensa este martes, tras un encuentro con la primera ministra de Lituania, Inga Ruginiene, Tusk ha declarado que, aunque la decisión final corresponde a los tribunales, para él, extraditar a este ciudadano “no responde a los intereses de Polonia, de la decencia y de la Justicia”.
Volodomir Z, sobre quien pesa una orden de detención europea, fue detenido hace siete días en Pruszkow, próximo a Varsovia. Recientemente, un tribunal polaco extendió su detención por otros 40 días mientras se llevan a cabo más investigaciones en un contexto de tensiones crecientes debido a la invasión rusa.
Tusk también ha aprovechado para reprobar a los responsables de la construcción del Nord Stream 2, un proyecto entre Rusia y Alemania que no se ha activado como medida de represalia al conflicto ucraniano, señalando que ningún gobierno polaco ha respaldado estas instalaciones y criticando que el problema real no es que el gasoducto pudiera ser destruido, sino que fuera construido en primer lugar.
Según Polskie Radio, Tusk ha destacado que aquellos involucrados en la edificación del Nord Stream 2 deberían “avergonzarse y mantenerse en silencio”. El primer ministro ha subrayado que el proyecto se llevó a cabo “en contra de los intereses más vitales” de la región, mientras que las autoridades alemanas describen a Volodimir Z como un buzo experimentado, sospechoso de integrar un equipo de saboteadores que instaló explosivos en los gasoductos Nord Stream 1 y 2 cerca de la isla de Bornholm, frente a Suecia.