El presidente checo, Petr Pavel, ha designado este martes al populista Andrej Babis como nuevo primer ministro después de que su formación, el conservador ANO (Sí), se impusiera en las elecciones celebradas el pasado mes de octubre.
“Lo nombro jefe de Gobierno. Confío en que dedicará toda su energía, conocimientos y experiencia al bien de la República Checa”, ha aseverado Pavel, que inicialmente se mostró reacio a que Babis, de 71 años, volviera a ponerse al frente del Ejecutivo en un momento de elevada tensión geopolítica.
Babis ya estuvo al mando del Gobierno entre 2017 y 2021. Con su retorno al poder, la República Checa podría alinearse con líderes como el eslovaco Robert Fico y el húngaro Viktor Orbán, acercándose al bloque de países más críticos con la Unión Europea mientras continúa la invasión de Ucrania y se multiplican los incidentes con drones en distintos puntos del continente.
El partido ANO se impuso con claridad en los comicios al lograr el 34,51 por ciento de los sufragios, porcentaje que se traduce en 80 de los 200 escaños que integran la Cámara Baja del Parlamento checo.
No obstante, Babis encara todavía un posible desenlace judicial por un presunto fraude vinculado al consorcio agroindustrial Agrofert, un caso reabierto tras la anulación de su absolución y que podría derivar en un conflicto de intereses, pese a que el dirigente ha prometido desligarse por completo del grupo empresarial.
Un tribunal de Praga, la capital del país, debe pronunciarse aún sobre si el ex primer ministro defraudó en torno a dos millones de euros en subvenciones de la Unión Europea dirigidas originalmente a pequeñas y medianas empresas. Aunque una corte archivó el procedimiento en 2023, este año el Tribunal Supremo ha ordenado reexaminarlo al apreciar indicios suficientes en su contra.










