En un lapso de sólo 48 horas, los devastadores incendios forestales en Portugal han consumido aproximadamente 64,000 hectáreas de terreno montañoso, de acuerdo con un balance preliminar. Este año, la cifra de áreas afectadas por los incendios es 17 veces superior a la registrada en el mismo intervalo del año 2024.
El Instituto de Conservación de la Naturaleza y de los Bosques (ICNF) había calculado que desde el inicio del año hasta el 14 de agosto se habían quemado cerca de 75,000 hectáreas. Sin embargo, este número ha escalado hasta sobrepasar las 139,000 hectáreas a la fecha actual, según reporta la agencia Lusa.
En apenas dos días, se ha visto afectado el 46 por ciento de la superficie total quemada desde comienzos de año. La situación sigue siendo crítica especialmente en las zonas centro y norte de Portugal, donde persiste un riesgo máximo de incendio en más de un centenar de concejos.
Entre los concejos en alerta se encuentra Guarda, donde numerosos equipos continúan luchando contra un fuego que el pasado viernes provocó la primera muerte en la presente crisis, un ex líder local que colaboraba en las labores para sofocar el fuego.