El jefe del gobierno marroquí, Aziz Ajanuch, ha elogiado el apoyo del Consejo de Seguridad de la ONU al plan de autonomía propuesto por Rabat para el Sáhara Occidental, calificándolo de ‘histórico y justo’. Ajanuch celebró esta decisión como fruto de un largo trabajo diplomático del reino alauita.
‘Es una victoria para todos los marroquíes del país y de los que están fuera (…), una oportunidad de diálogo sin vencedores ni vencidos que abre un camino para la prosperidad y la coexistencia pacífica en las provincias del sur de Marruecos’, declaró Ajanuch en Beni Melal durante un evento de su partido, Agrupación Nacional de Independientes, según Hesspress.
‘Durante 26 años la política exterior de Marruecos ha sido una expresión de sabiduría, realismo y firmeza bajo el liderazgo de su majestad el rey Mohamed VI’, añadió. ‘La diplomacia real ha hecho de Marruecos un modelo de credibilidad y respeto (…) que ha mantenido la causa nacional a salvo de cualquier usurpación’, enfatizó.
El embajador estadounidense en Marruecos, Duke Buchan, también ha valorado positivamente el respaldo del Consejo de Seguridad al plan de autonomía como un importante avance para resolver el conflicto. ‘Es un gran día. Es un gran paso adelante’, expresó en declaraciones a MAP. Igualmente, Mike Waltz, embajador estadounidense ante la ONU, aplaudió la decisión de apoyar el plan de autonomía como ‘única base’ para una resolución.
El rey Mohamed VI anunció que este apoyo abre un ‘nuevo y victorioso capítulo en el proceso de consagración de la identidad marroquí del Sáhara’ y pidió a los refugiados saharauis de Tinduf aprovechar ‘esta oportunidad histórica para reunirse con sus familias y beneficiarse’ del plan marroquí, que promueve el ‘desarrollo de su patria y la construcción de su futuro en un Marruecos unido’.
A pesar de la resistencia del Frente Polisario y las recientes críticas de este grupo a los cambios de postura de España y Francia, que ahora apoyan el plan de autonomía, y el respaldo de Estados Unidos, que en 2020 reconoció la soberanía marroquí sobre el Sáhara Occidental, el conflicto sigue sin resolverse completamente desde la ocupación de 1975 y el alto el fuego de 1991.
