El mandatario ruso, Vladimir Putin, ha lanzado una propuesta para establecer corredores humanitarios que faciliten el acceso de periodistas internacionales, incluidos los de Ucrania, a las áreas asediadas de Mirnogrado, Pokrovsk y Kupiansk. Esta iniciativa surge un día después de que Kiev refutara las afirmaciones de que sus fuerzas estuvieran rodeadas.
Desde el Ministerio de Defensa de Rusia, se ha informado que Putin ha ordenado «asegurar el tránsito libre de los reporteros extranjeros» hacia las localidades donde las tropas ucranianas están bloqueadas.
Adicionalmente, se ha indicado que el ejército ruso podría ofrecer una pausa en los combates de cinco a seis horas para permitir el movimiento seguro de la prensa, «siempre que se cumplan las garantías de seguridad para los periodistas y para el personal militar ruso».
Por su parte, las autoridades ucranianas han rechazado la propuesta, alertando sobre los riesgos de confiar en la palabra de Putin. «Francamente, no recomiendo a ningún periodista que confíe en ninguna de las propuestas de Putin», expresó Heorhi Tiji, portavoz de Asuntos Exteriores.
Tiji también aprovechó para recordar que cualquier desplazamiento a zonas bajo control ruso sin autorización de Ucrania es una infracción del Derecho Internacional y de la legislación nacional, con posibles repercusiones legales y de imagen. «Estamos vigilando atentamente», advirtió.
Un día antes, Rusia había declarado haber cercado las posiciones ucranianas en Kupiansk y Pokrovsk, aunque el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania negó estas aseveraciones.
















