El Ejército de Colombia ha informado este lunes de la liberación de los 18 militares que habían sido secuestrados el día anterior en el departamento del Chocó, en el noroeste del país, cuando llevaban a cabo un operativo contra la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Según han detallado las Fuerzas Armadas, los uniformados, retenidos en el municipio de Carmen de Atrato, han sido puestos bajo custodia de una comisión humanitaria encabezada por la Defensoría del Pueblo, que se ha desplazado a la zona para recibirlos.
Los soldados participaban en una operación dirigida contra Luis Eduardo David Manco, alias “Ramiro”, responsable de una estructura del “Frente de Guerra Occidental del ELN”, cuando, tal y como ha explicado el general William Caicedo, fueron rodeados por alrededor de 200 personas y trasladados por la fuerza a una escuela de la comunidad indígena Río Claro.
Durante el tiempo que permanecieron retenidos, el cabecilla habría logrado escapar junto a su pareja y otros cinco guerrilleros encargados de su seguridad, de acuerdo con información de la Inteligencia colombiana citada por la emisora W Radio.
Las mismas fuentes sostienen que estos hombres habrían coaccionado y amenazado a la población local para mantener a los militares cautivos y asegurar la huida de “Ramiro”, sobre quien pesan cuatro órdenes de captura por rebelión, narcotráfico y homicidio. Además, es buscado por su presunta implicación en extorsiones, desplazamientos forzados y reclutamiento de menores.
El Ministerio de Defensa, Pedro Sánchez, comunicó pocas horas después de conocerse el secuestro la interposición de una denuncia ante la Fiscalía y la puesta en marcha de “todos los canales institucionales, con el acompañamiento del Ministerio del Interior, la Gobernación del Chocó y de organismos de derechos humanos, priorizando la vida e integridad de nuestros hombres y evitando cualquier riesgo para la comunidad”.
Por otro lado, el ELN ha proclamado este domingo un alto el fuego con motivo de las celebraciones navideñas y de fin de año, que estará vigente del 24 de diciembre al 3 de enero. El anuncio llega tras un paro armado de 72 horas —entre el 15 y el 17 de diciembre— en el que se registró la instalación de explosivos en carreteras, la colocación de banderas del grupo y ataques contra instalaciones militares, incluido uno en Villanueva, La Guajira, que causó la muerte de siete militares el 18 de diciembre.
En paralelo, el Frente 33 del Estado Mayor Central de los Bloques y el Frente (EMBF), organización guerrillera comandada por Alexander Díaz Mendoza, alias “Calarcá Córdoba”, ha comunicado un cese indefinido de sus acciones ofensivas contra las fuerzas de seguridad.