Después de un cierre forzoso de dos años, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha reabierto su oficina en Jartum, la capital sudanesa, en un contexto de conflicto bélico iniciado en abril de 2023 entre el Ejército de Sudán y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), evento que ha precipitado una severa crisis humanitaria en la nación africana.
«¡La OIM Sudán celebra su regreso a Jartum! Después de más de dos años, la OIM ha reabierto oficialmente su oficina en Jartum, convirtiéndose en la primera agencia de la ONU en restablecer su presencia en la ciudad desde abril de 2023», se ha comunicado a través de la red social X, subrayando «su apoyo inquebrantable» hacia Sudán.
Este anuncio ocurre luego de que a mediados de mayo, el Ejército sudanés confirmara la liberación total del estado de Jartum y tras la visita de altos funcionarios, incluyendo al general Abdelfatá al Burhan y al primer ministro Kamil Idris, a la capital sudanesa a finales de julio, marcando su primer viaje desde el inicio de los enfrentamientos con las RSF en la primavera de 2023.
Las hostilidades entre el Ejército y las RSF se desencadenaron por profundas diferencias respecto al proceso de integración del grupo paramilitar, ahora catalogado como terrorista, en las Fuerzas Armadas, lo que resultó en el colapso total de la transición política iniciada tras el derrocamiento del régimen de Omar Hasán al Bashir en 2019 por un golpe de Estado militar.
Este proceso de transición enfrentó un retroceso significativo en octubre de 2021 cuando Abdelfatá al Burhan, jefe del Ejército y presidente del Consejo Soberano de Transición, llevó a cabo otro golpe de Estado, con el apoyo de Dagalo, su aliado en aquel momento, derrocando al primer ministro Abdalá Hamdok. Los esfuerzos por reintegrar a las RSF al Ejército solo intensificaron el conflicto que ha llevado a Sudán a una profunda crisis humanitaria.