El regidor Gergely Karacsony de Budapest fue citado a declarar este viernes en las instalaciones de la Policía de Hungría como sospechoso de haber organizado la marcha del Orgullo LGTBI, evento que fue vetado por el ejecutivo de Viktor Orbán. Durante su comparecencia, insistió en que la manifestación era conforme a la ley, argumentando que se trataba de un acontecimiento local que no estaba sujeto a la normativa sobre el derecho de reunión, por lo que la Policía no tenía facultades para impedirlo.
Karacsony, quien asistió vistiendo una camiseta con los colores de la bandera LGTBI y un escudo de Budapest, rechazó responder a las preguntas y se limitó a leer una declaración donde proclamaba su inocencia y acusaba al proceso de tener motivaciones políticas. <"La sospecha es claramente infundada. La estimada autoridad investigadora está llevando a cabo este procedimiento penal por orden del Gobierno, por motivos políticos. Por eso, no responderé preguntas. Lucharé por mi derecho ante el tribunal. Lamento que, en lugar de ocuparme de sus asuntos reales, tenga que participar en esto", afirmó el alcalde, quien además compartió esta declaración en su perfil de Facebook.
El 28 de junio, una gran multitud, estimada entre 35.000 y 40.000 personas, se manifestó en Budapest para defender los derechos LGTBI frente a la prohibición del gobierno húngaro, amparado en legislaciones anti LGTBI. Este acto se erigió como un emblema para las asociaciones de derechos sexuales y contó con una participación internacional significativa.
Karacsony animó a los ciudadanos a sumarse a la manifestación defendiendo que <"no se puede prohibir la libertad y el amor"> y resaltando la no discriminación y la <"diversidad"> como valores esenciales de la urbe.
Declaración ante la Policía
<"Los eventos de los gobiernos estatales y locales no están comprendidos en el ámbito de aplicación de la Ley del Derecho de Reunión", declaró el alcalde. Posteriormente, fue fotografiado por los agentes para crear un registro policial.
En su testimonio final, Karacsony expresó: <"Todo sistema autoritario llega al extremo de intentar reprimir a quienes no están de acuerdo con él. La historia húngara ha presenciado interrogatorios similares. Estaré orgulloso cuando mis nietos lean este protocolo en una colección de documentos. Porque no será posible prohibir ni reprimir la libertad y el amor">.