Eyal Zamir, jefe del Ejército israelí, ha comunicado el lunes la designación de cerca de treinta militares en nuevas posiciones, sujetas a la aprobación de Israel Katz, ministro de Defensa, quien horas antes había rechazado estas designaciones. Katz acusó a Zamir de iniciar conversaciones al respecto sin la debida coordinación o acuerdo, aunque las Fuerzas Armadas han enfatizado que Zamir posee la autoridad exclusiva para estas designaciones.
‘La reunión sobre la dotación de personal celebrada hoy por el jefe del Estado Mayor se llevó a cabo en contra de las instrucciones del ministro de Defensa y sin coordinación ni acuerdo previos, lo que supone una violación del procedimiento establecido. Por lo tanto, el ministro de Defensa no tiene intención de debatir ni aprobar los nombramientos o nombres que se han publicado’, declaró Katz, según información del canal israelí Arutz Sheva y otros medios como ‘Times of Israel’. ‘El jefe del Estado Mayor deberá coordinarse previamente con el ministro de Defensa antes de debatir estos u otros nombramientos futuros’, añadió.
En respuesta, un comunicado de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) reafirma que ‘la discusión se programó con antelación’ y Zamir recalca que ‘es la única autoridad competente en materia de normativa para nombrar a los comandantes con rango de coronel o superior en las FDI’. ‘El ministro tiene la autoridad para aprobarlos o rechazarlos’, recordó Zamir.
Entre los ascendidos se encuentra Manny Liberty, hasta ahora jefe de la Inteligencia militar de operaciones, que liderará la 98º división; Manor Yanai, designado jefe de las fuerzas terrestres; y los coroneles Or Vollozinsky y Eli David, quienes tomarán el mando de los cuerpos de tanques e ingenieros, respectivamente. Además, el coronel Liron Betito estará al frente de la División de Gaza.
Estos cambios se han anunciado solo tres días después de que el primer ministro, Benjamin Netanyahu, comunicara la aprobación de su gabinete de seguridad de los planes para la ocupación de la ciudad de Gaza y el ‘control de seguridad’ del enclave, una decisión ampliamente condenada internacionalmente.
















