Rasmesh Lekhak, ministro del Interior de Nepal, ha renunciado a su puesto este lunes debido a las manifestaciones en Katmandú, provocadas por la prohibición del acceso a las principales plataformas de redes sociales por violaciones a la ley nacional, resultando en aproximadamente una veintena de fallecidos.
Lekhak, quien desempeñaba el cargo desde julio de 2024, comunicó su decisión al primer ministro Sharma Oli en un encuentro del gabinete esta noche, citando razones éticas tras el fallecimiento de 19 personas y más de 400 heridos.
El mismo día, Gagan Thapa y Bishwa Prakash Sharma, líderes del Congreso en Nepal, habían solicitado su renuncia, reportó ‘The Kathmandu Post’. Además, el Partido Nacional Independiente (RSP), cuarto grupo más grande en la Cámara de Representantes, pidió la dimisión del primer ministro y la convocatoria de elecciones anticipadas, argumentando la pérdida de legitimidad del gobierno actual.
Kabindra Burlakoti, secretario general del RSP, criticó la gestión gubernamental de las protestas. Burlakoti afirmó: «Se debe formar una comisión de investigación judicial de alto nivel para investigar los hechos y tomar medidas enérgicas contra el ministro del Interior y todos los demás responsables».
Además, advirtió sobre la creciente frustración popular: «La gente no aceptará los intentos de extender el desgobierno derramando la sangre de sus propios hijos. Este régimen autoritario se enfrentará a una resistencia masiva».
Los manifestantes, que además repudian la corrupción y lo que ven como el fracaso de la clase política, se han agrupado sobre todo en áreas urbanas. Las autoridades han limitado las concentraciones y restringido la movilidad en ciertas zonas para prevenir más conflictos.