El recién electo presidente de Bolivia, Rodrigo Paz, ha declarado que sostuvo una conversación telefónica con el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, donde solicitó su colaboración respecto a la gestión de cárceles, indicando que durante su gobierno serán imprescindibles más instalaciones de este tipo.
“Le dije ‘ayúdame con las cárceles que vamos a necesitar muchas acá’”, comentó Paz durante una entrevista para Bolivisión, que fue recogida por ‘El Deber’. Paz describió a Bukele como una persona “muy simpática, muy franca, muy directa”, quien además lo sorprendió con una llamada telefónica para felicitarlo por su triunfo electoral.
Además, Paz anticipó la asistencia de Bukele a su ceremonia de investidura programada para el próximo 8 de noviembre en La Paz, en un evento que contará con la presencia de delegados de aproximadamente 20 países y representantes comerciales, de acuerdo con información del Partido Demócrata Cristiano, liderado por Paz.
“Es un acto netamente protocolar, pero tenemos información de que asistirán 20 países vecinos, y algo más importante aún es que de estos 20 países estarán llegando agregados comerciales, que es lo que más nos interesa a los bolivianos”, resaltó la diputada Catherine Pinto, del PDC, en declaraciones al portal de noticias Urgente.
Por otro lado, se ha criticado el sistema carcelario implementado por Bukele en El Salvador, el cual ha sido señalado por Amnistía Internacional por prácticas como la incomunicación prolongada y condiciones de detención inhumanas. “La incomunicación prolongada y las condiciones inhumanas de detención son parte de una estrategia deliberada para infundir miedo y quebrar tanto a las personas detenidas como a las comunidades que representan”, lamentó Ana Piquer, directora para las Américas de Amnistía, destacando un deterioro del espacio cívico en el país.
