El secretario de Estado, Marco Rubio, ha reiterado este jueves, en una conversación telefónica con el primer ministro camboyano, Hun Manet, que Washington mantiene su disposición a “facilitar conversaciones para garantizar la paz y la estabilidad” con Tailandia.
Durante la llamada, Rubio ha manifestado su inquietud por el repunte de la violencia entre los dos países y ha transmitido al jefe de Gobierno de Camboya el “deseo de paz” del presidente estadounidense, Donald Trump, de acuerdo con un comunicado difundido por el Departamento de Estado.
En este contexto, el secretario de Estado ha urgido a ambas partes a “implementar plenamente” el acuerdo de paz suscrito a finales de octubre en Kuala Lumpur, capital de Malasia, al margen de la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) y auspiciado por Trump.
En la jornada previa, representantes de Camboya y Tailandia se reunieron en el puesto fronterizo de Chong Phak Kat, en la provincia tailandesa de Chanthaburi, con el fin de avanzar hacia el fin de los choques armados entre ambos bandos.
La delegación de Tailandia estuvo liderada por el general Natthaphong Phraokaew, subjefe de las Fuerzas de Defensa, mientras que la representación camboyana fue encabezada por el mayor general Nhem Boraden, número dos de la oficina del ministro de Defensa.
La llamada se prolongó alrededor de media hora, según detalló el portavoz del Ministerio de Defensa, Surasant Kongsiri. Está previsto que los contactos —que llegaron a peligrar por las reservas de Camboya a celebrarlos en una zona que no considera “neutral” debido a los combates— continúen durante varios días.
En las últimas semanas, ambos países se han cruzado numerosas acusaciones de provocaciones a lo largo de la frontera común, reavivando la escalada de julio que desembocó en el citado acuerdo y que dejó en apenas cinco días cerca de medio centenar de muertos y cientos de miles de desplazados.