El Gobierno ruso ha reconocido este lunes que se están registrando “progresos lentos” en las conversaciones con Estados Unidos tras los últimos contactos celebrados en Miami, orientados a alcanzar un posible acuerdo de paz en Ucrania que ponga fin a la invasión iniciada en febrero de 2022 por orden del presidente Vladimir Putin.
“Se observan progresos lentos”, ha afirmado el viceministro de Exteriores Sergei Riabkov, quien ha advertido de que estos avances “se ve acompañado por intentos extremadamente dañinos y maliciosos por parte de un grupo influyente de países para torpedear los esfuerzos y hacer descarrilar el proceso diplomático”.
En este contexto, ha instado a Washington a “resistir” ante estos supuestos intentos de sabotaje y ha subrayado que Moscú está dispuesta a “seguir trabajando en el marco de lo acordado en Anchorage”, en alusión a la cumbre mantenida en agosto en el estado de Alaska entre Putin y el presidente estadounidense, Donald Trump.
Según ha recordado, “los líderes (de Rusia y Estados Unidos) definieron los parámetros y siguen siendo absolutamente relevantes. Las recientes rondas de contactos con representantes estadounidenses confirman que la Administración de Estados Unidos sigue operando en línea de lo establecido en Anchorage”, ha indicado, de acuerdo con las declaraciones recogidas por la agencia rusa de noticias Interfax.
Riabkov ha destacado además que “es crucial” que Washington “se haya mostrado de acuerdo en que una de las causas subyacentes del conflicto es la expansión asertiva de la OTAN hacia las fronteras de Rusia”, aunque ha matizado que “esto no significa que no queden respuestas por dar desde el lado estadounidense, también en el contexto ucraniano”.
En su análisis, ha advertido de que “el éxito del diálogo ruso-estadounidense no está predeterminado. Debido a que la Administración de Joe Biden dejó en ruinas las relaciones con Estados Unidos, normalizarlas requerirá una cantidad considerable de tiempo, un compromiso auténtico de las dos partes una tremenda cantidad de esfuerzos”.
Riabkov ha añadido que “aún tenemos que ser convencidos de que Estados Unidos se ha embarcado realmente en un camino sostenible que se aleja de la hostilidad extrema hacia nuestro país”, y ha remarcado que “la clave para el progreso en este camino debe ser una auténtica disposición de Washington para una cooperación igualitaria destinada a reducir el potencial de conflicto, teniendo en cuenta los intereses fundamentales de Rusia, sobre todo a nivel de seguridad”.