El FSB de Rusia ha declarado que sus recientes ataques en Ucrania han conseguido aniquilar el programa de misiles balísticos Sapsan, empleado por el ejército ucraniano para atacar objetivos dentro de Rusia, lejos de la zona fronteriza.
La operación, ejecutada en conjunto en julio por el Ministerio de Defensa y el FSB, se centró en bombardeos a diversas instalaciones industriales en las áreas de Dnipropetrovsk y Sumi, de acuerdo con información proporcionada por estas agencias.
El FSB ha calificado este emprendimiento como un proyecto ‘secreto’ que utiliza tecnología de la era soviética. Con el apoyo de naciones de la OTAN, este programa buscaba, según Moscú, continuar con los ataques hacia territorio ruso. Específicamente, Rusia acusa a Alemania de financiar este desarrollo de misiles en Ucrania.
Adicionalmente, el Ministerio de Defensa ruso ha confirmado que, además del programa Sapsan, los ataques resultaron en la destrucción de infraestructuras de defensa antiaérea cercanas a los sitios atacados, incluyendo cuatro unidades del sistema Patriot.