El Gobierno ruso ha catalogado como “profundamente desestabilizadoras” las prácticas nucleares anuales de la OTAN que comenzaron el 13 de octubre, donde participan catorce naciones miembros y 2.000 soldados, realizando ejercicios aéreos sobre el mar del Norte con 60 aeronaves capaces de portar ojivas nucleares.
“La existencia de esta práctica de misiones nucleares conjuntas en el marco de lo que las cuales los países de la alianza mejoran regularmente sus capacidades en el uso colectivo de armas nucleares estadounidenses desplegadas en Europa contra el territorio de Rusia y los aliados de Rusia es profundamente desestabilizadora”, declaró Maria Zajarova, portavoz del Ministerio de Exteriores ruso.
“Por supuesto, no pretendemos ignorar estos asuntos. Los analizamos de cerca para tenerlos en cuenta en nuestra propia planificación militar, incluidos los aspectos relevantes de la disuasión nuclear”, señaló en una conferencia de prensa, según información de la agencia Interfax.
El entrenamiento se desarrolla sobre el mar del Norte, afectando los espacios aéreos de Dinamarca y Reino Unido, así como de los Países Bajos y Bélgica, quienes acogen a los participantes. La OTAN ha indicado que estas maniobras, que tendrán una duración de dos semanas, no contemplan ejercicios de fuego real.
Por otro lado, Vladimir Putin, presidente de Rusia, supervisó recientemente ejercicios de las fuerzas nucleares estratégicas de su país, que incluyeron simulacros de lanzamiento de misiles balísticos intercontinentales y de misiles de crucero.
Rusia realiza estas prácticas de forma periódica para evaluar su capacidad y preparación ante potenciales amenazas. Estos últimos ejercicios ocurren en un contexto de alta tensión debido a la invasión de Ucrania iniciada en febrero de 2022, y en un escenario donde no se observan avances significativos en el ámbito diplomático, incluyendo las solicitudes de Kiev a Estados Unidos para la entrega de misiles Tomahawk.