Este lunes, el Gobierno ruso ha expresado su descontento con Azerbaiyán por imponer restricciones a periodistas y cancelar eventos rusos. Esto ocurre después de un operativo en Ekaterimburgo que resultó en la detención de varios azeríes, acusados de integrar una organización delictiva y cometer homicidios, con un saldo de detenidos y dos muertes.
Dimitri Peskov, portavoz del Kremlin, ha manifestado su preocupación por la reacción de Azerbaiyán frente a las acciones de las autoridades rusas y ha admitido que es necesario continuar esclareciendo ‘las causas y el carácter de los sucesos’ que provocaron tales medidas por parte de Azerbaiyán.
‘Creemos que todo lo que está sucediendo está relacionado con la labor de las fuerzas del orden y no puede ni debe ser motivo de tal reacción’, declaró Peskov, según informó Interfax.
Azerbaiyán ha suspendido la visita de una delegación parlamentaria a Rusia y varios actos culturales. Además, convocó a diplomáticos rusos en Bakú para discutir sobre la detención y fallecimiento de ciudadanos azeríes en una operación policial.
Por otro lado, Bakú ha culpado a las fuerzas de seguridad rusas por las muertes de dos personas y por ejecutar una operación con motivaciones étnicas. Mientras tanto, Rusia asegura que los arrestados son sospechosos de formar parte de un grupo criminal responsable de asesinatos selectivos ocurridos en 2001, 2010 y 2011.
Además, las autoridades azerbaiyanas han intervenido en las oficinas de medios estatales rusos en Bakú, impidiendo el acceso de diplomáticos rusos a los periodistas afectados.
Debido a estos incidentes, el embajador de Azerbaiyán en Moscú, Rahman Mustafayev, fue convocado a la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores tras la ‘detención ilegal de dos periodistas rusos’ y las recientes ‘acciones hostiles’ de Bakú, según informó la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Maria Zajarova.
Las autoridades rusas han confirmado la detención de seis ciudadanos rusos, algunos de los cuales ya han admitido su participación en los crímenes imputados, mientras se investigan las causas de una de las muertes ocurridas durante la operación en Ekaterimburgo, después de confirmarse que la otra víctima murió por insuficiencia cardiaca.
La comisionada de Derechos Humanos de Rusia, Tatiana Moskalkova, ha solicitado a la Fiscalía General que investigue la operación, en respuesta a las quejas de Azerbaiyán.