El mariscal Jalifa Haftar, una figura clave en el gobierno paralelo del este de Libia, ha elevado a su hijo Sadam Haftar a la posición de ‘número dos’ en el Ejército Nacional Libio este lunes.
Según un anuncio realizado por el Comando General del ejército, esta medida es un componente de la ‘visión 2030 para el desarrollo y la mejora del rendimiento general de las fuerzas armadas’ y anticipa más nombramientos ‘en los próximos días’.
Sadam Haftar, quien actualmente ocupa el cargo de jefe del Estado Mayor de tierra y tiene 34 años, es el más joven de los seis hijos de Haftar. Es reconocido como uno de los posibles sucesores en los roles políticos y militares de su padre, considerado uno de los líderes más influyentes en la región oriental de Libia.
Libia sigue siendo escenario de intensos conflictos. La administración de Abdul Hamid Dbeibé, avalada por la comunidad internacional, se enfrenta a las autoridades del este, donde figuras como Aguila Salé y el propio general Haftar juegan un papel crucial, en un entorno marcado por la lucha de numerosos grupos armados que intentan afianzar su poder en varias zonas del país, incluyendo la capital, Trípoli.