Samia Suluhu Hassan inicia su segundo mandato en Tanzania tras una abrumadora victoria electoral

Este lunes, Samia Suluhu Hassan ha asumido su segundo mandato como presidenta de Tanzania, en una ceremonia realizada en una instalación militar de Dodoma, la capital. La mandataria obtuvo más del 97,6% de los votos en unas elecciones marcadas por la ausencia de candidatos opositores significativos, debido a la exclusión de sus principales rivales.

Durante el acto, que tuvo una duración aproximada de dos minutos y fue emitido en directo por la cadena estatal TBC, solo asistieron altos funcionarios del partido gobernante, Chama Cha Mapinduzi (CCM), excluyendo al público general. La investidura se desarrolló bajo un fuerte dispositivo de seguridad tanto en Dodoma como en Dar es Salam, exacerbando las tensiones a raíz de la represión de protestas recientes.

El gobierno de Estados Unidos ha pedido a sus ciudadanos reconsiderar cualquier viaje a Tanzania debido a un incremento de la inseguridad relacionada con las protestas, que han resultado en cientos de muertos, según informes de las fuerzas de seguridad. Además, el Departamento de Estado ha mencionado el aumento de crímenes, terrorismo y ataques contra la comunidad LGBT en el país.

«Las manifestaciones pueden ser impredecibles. El Gobierno tanzano incrementa la presencia de seguridad en torno a las protestas, lo que incluye puestos de control y bloqueos de carreteras», indicaron desde el Departamento de Estado, aconsejando precaución a quienes decidan viajar a pesar de las advertencias.

Por otro lado, el principal partido de la oposición, Chadema, ha acusado al gobierno de cometer «asesinatos en masa» y ha solicitado una investigación urgente por parte de la comunidad internacional y el Tribunal Penal Internacional. Además, han pedido la restauración del acceso a Internet en todo el país.

Samia Suluhu Hassan, que se convirtió en presidenta en 2021 tras la muerte del entonces presidente John Magufuli, fue considerada la favorita para reelegirse tras la detención de su principal rival, Tundu Lissu, acusado de «traición», y la eliminación de otro candidato opositor.