El recientemente reelegido primer ministro francés, Sébastien Lecornu, ha declarado este lunes que la principal tarea de su administración será ‘superar la crisis política’ que atraviesa Francia. Este anuncio lo realizó durante el primer encuentro laboral con los 34 integrantes de su renovado gabinete, después de haber presentado su dimisión a comienzos de la semana anterior.
‘La responsabilidad que recae sobre ustedes, sobre mí y sobre nosotros ante el país, y quizás también un poco ante la Historia, exige un compromiso permanente. Aprecio cada riesgo que han tomado’, manifestó Lecornu a sus ministros, alabando su ‘compromiso’ por unirse al ejecutivo en momentos tan ‘difíciles’.
Además, Lecornu instó a los ministros a ‘dejar de lado los egos’ para acabar con la crisis política. También les solicitó trabajar en colaboración con la oposición, los sindicatos y otros grupos de la sociedad civil, en un contexto donde La Francia Insumisa (LFI) y Agrupación Nacional han presentado mociones de censura contra su gobierno.
Se espera que el ejecutivo, compuesto tanto por personalidades de la sociedad civil como por políticos experimentados y jóvenes parlamentarios, presente dos proyectos de presupuesto en el Consejo de Ministros de este martes, tras el regreso del presidente Emmanuel Macron de Egipto, donde apoyó el acuerdo de alto el fuego en la Franja de Gaza.
De acuerdo con la Constitución francesa, el Parlamento tiene un plazo de 70 días hasta el 31 de diciembre para revisar el proyecto de presupuesto para 2026, siendo este martes el último día para iniciar el proceso. Lecornu también planea ofrecer su discurso de política general. Macron ha reafirmado su intención de completar su mandato actual hasta 2027 y ha descartado repetidamente la idea de disolver la Asamblea Nacional. La dimisión de Lecornu la semana pasada fue la cuarta en apenas un año, siguiendo a las de Gabriel Attal, Michel Barnier y François Bayrou.