Las autoridades sirias han informado de un lamentable incidente en la presa de Tishrin, ubicada en Alepo, donde dos soldados perdieron la vida y otro resultó herido, atribuyendo la responsabilidad a las fuerzas kurdo-árabes del noreste de Siria, a pesar de que estas últimas han negado su participación en los hechos.
Desde el Ministerio de Defensa, a través de declaraciones proporcionadas a SANA, se ha comunicado que el ataque, perpetrado con un misil, se dirigió a una instalación militar cercana a la presa mencionada, causando la muerte de dos integrantes del ejército y dejando a otro gravemente herido. Este acto ha sido interpretado como una negativa de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) a los compromisos adquiridos con el gobierno de Damasco tras el derrocamiento del presidente Bashar al Assad en diciembre del año anterior.
Por otro lado, las FDS han rechazado estas acusaciones y han explicado a través de un comunicado en Telegram que el incidente fue provocado por la detonación de una mina terrestre, desvinculándose de cualquier responsabilidad. Además, han criticado la información distribuida por SANA, calificándola de “incorrecta” y han solicitado a los medios de comunicación evitar la propagación de datos erróneos que puedan escalar las tensiones o inducir a error al público.
En su comunicación, las FDS subrayan su dedicación a la reducción de tensiones y a la continuación de sus esfuerzos por asegurar la estabilidad y protección de los habitantes en las zonas de conflicto.
















