Este martes, la Fiscalía de Estambul ha solicitado una condena superior a los 2.000 años de prisión para Ekrem Imamoglu, exalcalde de la ciudad, acusado de corrupción y ya condenado previamente por haber ofendido al fiscal principal de Estambul, Akin Gurlek.
Akin Gurlek, quien había sido señalado por Imamoglu de perseguir a opositores políticos mediante investigaciones con supuestos fines políticos, ha declarado que la acusación abarca cerca de 4.000 páginas y concierne a aproximadamente 400 individuos.
Por tanto, ha propuesto una pena de 2.352 años para el suspendido alcalde y contrincante del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, por liderar lo que se describe como una extensa organización delictiva, de acuerdo con lo reportado por el canal TRT Haber.
De esas 400 personas, más de cien ya están detenidas, aunque se describe a Imamoglu como el ‘fundador y líder de la organización’ supuestamente delictiva.
Ese mismo día, Hasan Imamoglu, padre de Ekrem, y su hijo Selim, también prestaron declaración ante la Policía en relación con el caso de corrupción. A ambos se les ha prohibido salir del país.
El Partido Republicano del Pueblo (CHP), liderando la oposición, ha criticado en varias ocasiones al Gobierno por usar el sistema judicial para acallar a sus detractores, citando el caso de Imamoglu como un claro ejemplo debido a su influencia en la política nacional y sus intenciones de desafiar al presidente en las elecciones.
La detención de Imamoglu desencadenó múltiples protestas en el país, en medio de críticas al Gobierno por su presunta manipulación del sistema judicial con fines electorales. Desde su arresto, se ha procedido a la detención de numerosos miembros del CHP, altos funcionarios de la Alcaldía de Estambul y de otros municipios turcos.