Tras tomar el poder en Afganistán en 2021, el régimen talibán ha solicitado ‘garantías firmes’ a Pakistán para proceder a la reapertura de las fronteras y las rutas comerciales, en un contexto de informaciones sobre permisos de Islamabad para que convoyes de la ONU crucen hacia el país centroasiático.
“Las rutas comerciales con Pakistán se reabrirán cuando se obtengan garantías firmes del Gobierno paquistaní, de modo que en el futuro estas rutas no se cierren debido a presiones políticas, usos ilegales o presiones sobre la gente, y se protejan los derechos de los comerciantes y los pueblos de ambos países”, declaró Zabehulá Muyahid, portavoz del Gobierno afgano.
Además, indicó que ‘las rutas comerciales y de tránsito entre Afganistán y Pakistán fueron bloqueadas ilegalmente por Pakistán mediante presiones políticas y económicas, lo cual ocasionó graves pérdidas a la población de ambos países’, tras dos meses de cierre por tensiones y enfrentamientos en la frontera.
“Dado que Afganistán obtiene sus necesidades de muchos otros países, el Emirato Islámico ha decidido ampliar el comercio y el tránsito, así como la prosperidad y el comercio honorable entre ambas partes”, explicó, según un comunicado en su cuenta de la red social X.
Estas declaraciones de Muyahid se producen después de que Tahir Andrabi, portavoz del Ministerio de Exteriores paquistaní, confirmase a Geo TV la reapertura de los pasos de Torjam y Chaman para convoyes humanitarios de la ONU, aunque el comercio bilateral permanece suspendido. Andrabi enfatizó que Pakistán ‘no tiene ningún problema con el pueblo afgano’.
Las negociaciones entre Pakistán y Afganistán continúan tras dos meses de diálogo para resolver las tensiones, exacerbadas por acusaciones de Islamabad sobre un aumento de ataques del grupo Tehrik-i-Taliban Pakistan (TTP). En respuesta, los talibán afganos lanzaron una ofensiva en la frontera, culminando en combates intensos que cesaron temporalmente con un alto el fuego.











