La Fiscalía del Tribunal Penal Internacional (TPI) ha expresado su preocupación este lunes sobre los actos violentos perpetrados por las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) en El Fasher, capital de Darfur Norte, sugiriendo que estos actos podrían ser considerados como crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad tras la reciente toma de la ciudad.
La entidad judicial ha comunicado su “profunda alarma” y “gran preocupación” ante los informes de “asesinatos en masa, violaciones y otros crímenes” atribuidos a las RSF. Estos hechos se entienden como parte de “un patrón más amplio de violencia que ha afligido a toda la región de Darfur desde abril de 2023”, momento en que se desató el conflicto entre los paramilitares y las Fuerzas Armadas sudanesas.
“Estos actos, de ser sustanciados, podrían constituir crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad bajo el Estatuto de Roma”, indicó el TPI en su declaración, en respuesta a las acusaciones de ejecuciones, violencia sexual y saqueos en la ciudad, algunos de los cuales han sido difundidos por los mismos implicados a través de Internet y redes sociales.
La Fiscalía recordó su jurisdicción sobre los crímenes en el marco del conflicto en Darfur, basándose en una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU de 2005, y destacó que “está investigando los crímenes supuestamente perpetrados en Darfur desde el estallido de las hostilidades en abril de 2023”.
Además, resaltó su labor intensiva en la zona, incluyendo “repetidos despliegues sobre el terreno, una profundización de las interacciones con grupos de víctimas y la sociedad civil y un aumento de la cooperación con las autoridades nacionales y las organizaciones internacionales”, con el fin de “preservar y recopilar las pruebas relevantes de cara a su uso en futuros procedimientos”.
El TPI también mencionó la reciente imputación de un alto cargo de las milicias ‘yanyauid’ –de las que surgieron las RSF– por “crímenes similares” en 2004, como “una advertencia a todas las partes en el conflicto en Darfur de que habrá rendición de cuentas por estos crímenes atroces”.
Naciones Unidas denunció que las atrocidades incluyen “ejecuciones sumarias, asesinatos en masa, violaciones, ataques contra trabajadores humanitarios, saqueos, secuestros y desplazamientos forzosos”, y la situación “es caótica sobre el terreno” con telecomunicaciones cortadas.
Seif Magango, portavoz de la oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, estimó que el número de víctimas civiles podría ser de cientos. Las RSF, acusadas de numerosas atrocidades en el pasado, han detenido a varios de sus miembros, incluido un comandante que apareció en vídeos ejecutando sumariamente a personas en El Fasher, tras el reconocimiento de abusos y la promesa de una investigación por parte de su líder, Mohamed Hamdan Dagalo, alias ‘Hemedti’.
















