En un reciente comunicado, las autoridades de Indonesia han confirmado que el número de víctimas mortales tras el colapso de una escuela islámica en Java Oriental ha aumentado a cinco. Paralelamente, cerca de 60 individuos continúan atrapados bajo los escombros, mientras los equipos de rescate intensifican sus esfuerzos para encontrar supervivientes.
Yudhi Bramantyo, director de operaciones de la Agencia Nacional de Búsqueda y Rescate de Indonesia (Basarnas), ha revelado que en las últimas horas se ha logrado rescatar a cinco personas con vida. No obstante, ha advertido que las posibilidades de hallar a más supervivientes disminuyen conforme transcurre el tiempo.
La tragedia afectó principalmente a estudiantes de entre 13 y 18 años, aunque también había profesores presentes en el momento del desastre. “Los cinco supervivientes del último día pudieron comunicarse con los equipos de emergencias”, afirmó Bramantyo.
Tras el colapso del Colegio Islámico Al Joziny, en Sidoarjo, aproximadamente un centenar de personas lograron escapar. La Agencia Nacional de Gestión de Desastres (BNPB) informó que los rescatistas han identificado 15 posibles puntos con supervivientes y han detectado señales de vida en al menos seis de ellos. Las labores de rescate se llevan a cabo principalmente de forma manual, creando túneles para acceder a estas zonas.
Estos incidentes no son raros en Indonesia. A principios de septiembre, un suceso similar ocurrió en Java Occidental, dejando tres muertos y dos heridos durante la llamada a la oración. En 2018, el derrumbe de una entreplanta en la Bolsa de Yakarta cobró la vida de aproximadamente 75 personas.