Aproximadamente 40 migrantes y refugiados han perdido la vida tras el hundimiento del barco en el que viajaban cerca de las costas tunecinas, de acuerdo con fuentes del poder judicial que también han informado sobre el rescate de otros 30 supervivientes del trágico suceso.
El hallazgo de la nave se produjo frente a Salakta, en la costa oriental de Túnez, tal como ha relatado el portavoz de un tribunal local, Walid Chatrbi, durante una entrevista con la emisora Mosaique FM. A raíz de este suceso, la Fiscalía ha iniciado una investigación.
Según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), se estima que alrededor de 900 individuos han muerto en el Mediterráneo central mientras intentaban llegar a las costas del sur de Europa. Desde el año 2014, la cifra acumulada de víctimas asciende a casi 25.500 personas.