El presidente del Tribunal Supremo de Brasil, Alexandre de Moraes, ha desestimado la solicitud de la defensa de Jair Bolsonaro para revocar su arresto domiciliario, argumentando que persiste un riesgo significativo de fuga.
«La condena del reo Jair Messias Bolsonaro a pena de privación de libertad de 27 años y 3 meses en régimen inicial» de arresto domiciliario se mantiene ante el «temor fundado de fuga del reo».
La defensa de Bolsonaro había solicitado reevaluar la decisión de arresto domiciliario y la restricción de uso de redes sociales, citando que la acusación de la Fiscalía no lo incluía entre los imputados por coacción al Tribunal Supremo. Paulo Cunha Bueno, el abogado de Bolsonaro, fue quien explicó los fundamentos de esta solicitud.
Bolsonaro fue sentenciado a principios de septiembre a 27 años y tres meses de prisión por liderar un esquema golpista destinado a mantenerlo en el poder tras los comicios de octubre de 2022. La sentencia se hará efectiva una vez que se agoten todos los recursos de apelación disponibles para la defensa.
Las condiciones de arresto domiciliario para Bolsonaro se establecieron a principios de agosto, en respuesta a presuntos intentos de interferir en el proceso judicial. Un mes antes, se le ordenó llevar una tobillera electrónica, permanecer en su domicilio durante noches y fines de semana, y abstenerse de usar redes sociales o comunicarse con otros implicados en la investigación.
De Moraes tomó la decisión de intensificar las medidas cautelares después de que Bolsonaro incumpliera algunas de las impuestas en julio, al participar en una manifestación de apoyo a través de redes sociales y en un evento de un aliado político.