Este martes, el Ejército de Israel ha verificado que sus fuerzas militares accedieron el lunes a un inmueble en Deir al Balá, ubicado en el corazón de la Franja de Gaza, que la Organización Mundial de la Salud (OMS) utiliza para hospedar a su equipo, en un operativo donde se aprehendió a varios empleados del ente bajo la acusación de «terrorismo».
En un comunicado emitido a través de la red social X, el Ejército israelí detalló que «las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) detectaron disparos contra ellos en la zona de Deir al Balá y respondieron al fuego contra la zona donde se detectaron los disparos», añadiendo que previamente se había ordenado la evacuación de los civiles «por su propia seguridad».
Además, el comunicado subraya que las «organizaciones internacionales que operan en la zona» fueron informadas sobre la situación y lograron evacuar a su personal «de forma segura, en coordinación con las fuerzas y sujeto a las necesidades operativas». Se enfatizó en que tras las investigaciones iniciales, «la mayoría de los detenidos fueron liberados y evacuados del área, en coordinación con los organismos internacionales».
El Ejército ha subrayado que «Cabe destacar que los sospechosos están siendo tratados de acuerdo con el Derecho Internacional. A veces, durante un interrogatorio, es necesario que los sospechosos de actividad terrorista se quiten temporalmente parte de su ropa para poder registrarlos y asegurarse de que no estén escondiendo cinturones explosivos u otras armas».
Finalmente, las FDI han asegurado que no dejarán de actuar en regiones donde se detecten actividades terroristas que comprometan la seguridad de Israel, en un contexto de críticas internacionales por el alto número de bajas civiles y los significativos daños causados por su ofensiva en Gaza.
Por parte de la OMS, se mencionó que el lunes se realizaron tres ataques, incluyendo bombardeos, a sus instalaciones en Deir al Balá, afectando a un almacén y un refugio para su personal y sus familias, según declaraciones de Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien también reportó la detención de dos trabajadores por parte de las fuerzas israelíes y las duras condiciones a las que fueron expuestas las mujeres y niños durante la evacuación.