El presidente Donald Trump ha declarado que se preparan operaciones terrestres tras los recientes bombardeos en el Pacífico a supuestas narcolanchas que dejaron cinco fallecidos, insinuando una expansión de la intervención militar, aunque no especificó los lugares de estas futuras operaciones. Este anuncio se produce como parte de la estrategia de su administración para prevenir el ingreso de estupefacientes en Estados Unidos.
“La tierra será lo siguiente,” afirmó Trump durante una rueda de prensa, en presencia de figuras como Pete Hegseth, secretario de Defensa, a quien, según Bloomberg, instruyó: “Ve al Congreso y cuéntaselo”. Trump también ironizó sobre la posible oposición a estas medidas preguntando, “¿Qué van a hacer? ¿Decir: ‘Vaya, no queremos detener el flujo de drogas’?”.
Trump ha señalado que los ataques terrestres serían “mucho más peligrosos para ellos”, refiriéndose a los supuestos narcotraficantes, tras haber ordenado bombardeos que resultaron en la muerte de cinco personas el martes y miércoles. “Vamos a matar a las personas que traen drogas a nuestro país,” declaró, sugiriendo una posible declaración de guerra contra los cárteles de drogas.
Desde septiembre, Estados Unidos ha destruido ocho embarcaciones presuntamente utilizadas para el tráfico de drogas, resultando en la muerte de al menos treinta personas. Los ataques más recientes indican una posible expansión de la campaña militar, que anteriormente se centraba en el Caribe. Estas acciones han sido criticadas por Venezuela y Colombia, quienes han denunciado las operaciones como ejecuciones extrajudiciales.
La tensión entre Trump y líderes como el presidente colombiano Gustavo Petro, a quien Trump ha llamado “matón y mal tipo que produce mucha droga”, escaló con amenazas de “medidas muy severas”. Simultáneamente, Trump ha autorizado operaciones de la CIA en Venezuela, donde el presidente Nicolás Maduro ha respondido con el despliegue de tropas en cinco provincias.














