El mandatario estadounidense, Donald Trump, ha confirmado este miércoles que brindará el apoyo necesario de su gobierno para resolver el conflicto en Sudán, que actualmente enfrenta una de las peores crisis humanitarias del mundo. Esta decisión llega tras la petición del príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salmán, quien recientemente visitó la Casa Blanca, marcando su primer encuentro en siete años.
“Líderes árabes de todo el mundo, en particular el muy respetado príncipe heredero de Arabia Saudí, que acaba de salir de Estados Unidos, me han pedido que utilice el poder y la influencia de la Presidencia (estadounidense) para poner fin de inmediato a lo que está ocurriendo en Sudán”, expresó Trump a través de su perfil en la red social Truth Social.
Trump ha indicado que coordinará con Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y otros aliados de la región para terminar con las atrocidades en Sudán y buscar su estabilización. “Jartum es una gran civilización y cultura, lamentablemente corrompida, que puede recuperarse con la cooperación y coordinación de los países, incluidos los ricos en recursos de la región, que desean que esto suceda”, señaló.
El presidente estadounidense también destacó la gravedad de la situación en Sudán, describiéndola como la crisis humanitaria más severa en la historia. “Se están cometiendo atrocidades tremendas en el territorio sudanés, convirtiéndolo en el lugar más violento del planeta. Se necesitan con urgencia alimentos, médicos y todo lo demás”, reconoció.
La guerra civil en Sudán, que ha escalado debido a discrepancias sobre la integración del grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) en el ejército, ha llevado al país a una crisis humanitaria crítica, con millones de desplazados y refugiados y problemas graves en infraestructuras esenciales.
