El presidente estadounidense, Donald Trump, ha declarado este jueves su firme oposición a cualquier intento de Israel de anexionarse Cisjordania, en respuesta a las presiones del sector más extremista del gobierno de Benjamin Netanyahu. Desde el Despacho Oval, Trump ha sido contundente: “Aunque hable con él o no hable, que he hablado, no voy a permitir que Israel se anexione Cisjordania”, subrayando su postura con un enfático “ya es suficiente” y “es hora de parar”.
Estas declaraciones cobran relevancia tras filtraciones a la prensa internacional sobre promesas de Trump a líderes árabes y musulmanes en una reunión a puerta cerrada en Nueva York, al margen de la Asamblea General de la ONU. En dicho encuentro, calificado por Trump como el más significativo del día, participaron líderes de países como Qatar, Jordania, Turquía, Pakistán, Indonesia, Egipto, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí.
Paralelamente, la tensión aumenta debido a las amenazas de anexión en Israel, donde figuras ultranacionalistas como Bezalel Smotrich y Itamar Ben Gvir han propuesto planes para apropiarse de casi toda Cisjordania. Recientemente, un departamento del Ministerio de Defensa israelí ha designado como “terrenos estatales” un área considerable cerca de un asentamiento ilegal en el norte de Cisjordania, aumentando la preocupación internacional.