El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha dado a conocer que, hasta ahora en 2025, unos 40,000 niños en Darfur Norte (Sudán) requieren tratamiento urgente por desnutrición aguda grave (SAM), lo que representa un aumento del 46% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
«La brutal guerra civil de Sudán está empujando a más niños al borde de la inanición», han advertido desde UNICEF, destacando que las tasas de desnutrición han excedido los umbrales de emergencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 9 de las 13 localidades de Darfur.
«Los niños de Darfur sufren hambre a causa del conflicto y se ven privados de la ayuda que podría salvarlos. Este es un momento decisivo; la vida de los niños depende de si el mundo decide actuar o no», ha declarado Sheldon Yett, representante de UNICEF en el país.
La situación en El Fasher, capital de Darfur, es «particularmente catastrófica». El acceso a la ayuda humanitaria está casi completamente cortado desde abril de 2023, cuando las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) cercaron la ciudad, la última en manos del gobierno en la región.
Aunque UNICEF logró entregar un cargamento de suministros adicionales a principios de año en El Fasher, los intentos posteriores de distribuir más ayuda han enfrentado obstáculos, exacerbando una crisis que ha causado desplazamientos masivos y que afecta no solo a Darfur.
Por ejemplo, las admisiones por desnutrición aguda grave han aumentado un 683% en Al Jazirah, un 174% en Jartum y un 70% en Kordofán Norte, según datos de UNICEF.
Además, la temporada de escasez entre cosechas, brotes de cólera, casos de sarampión y el colapso de los servicios sanitarios «están agravando aún más la crisis, poniendo a los niños vulnerables en un riesgo aún mayor», «aumentando rápidamente el riesgo de mortalidad infantil masiva, sobre todo en zonas que ya se acercan al umbral de la hambruna», han lamentado desde UNICEF.
La agencia ha hecho un llamado a «todas las partes» en el terreno para que faciliten un «acceso humanitario sin trabas» a las áreas más afectadas y ha apelado a sus aliados internacionales para que incrementen la presión diplomática para que cesen las hostilidades y aporten «más fondos vitales» para «mantener y ampliar los servicios esenciales» en el país.
Sudán ha entrado en una devastadora guerra en abril de 2023 debido a desacuerdos sobre la integración de las RSF dentro de las Fuerzas Armadas, descarrilando totalmente la transición iniciada tras el derrocamiento en 2019 de Omar Hasán al Bashir, provocando una grave crisis humanitaria y la mayor crisis de desplazados a nivel mundial.
















