El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha expresado su preocupación este miércoles por el fallecimiento de más de 450 individuos, de los cuales al menos 35 son niños, debido a los recientes conflictos en Kordofán Norte, Sudán, atribuidos a las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), en el contexto de la guerra civil que azota al país africano desde abril de 2023.
La directora ejecutiva de UNICEF, Catherine Russell, ha indicado que las informaciones confirman la muerte de «más de 450 civiles, entre ellos al menos 24 niños, once niñas y dos embarazadas» por los «horribles ataques» ocurridos durante el fin de semana en las cercanías de la ciudad de Bara, incluyendo Shag Alnom y Hilat Hamid.
«Con decenas de heridos y muchos desaparecidos, tememos que el número de víctimas infantiles pueda aumentar aún más», ha mencionado, antes de enfatizar que estos ataques «son un atrocidad» que «representa un repunte aterrador de violencia y un desprecio total por la vida humana, el Derecho Internacional Humanitario y los principios más básicos de la humanidad».
«UNICEF condena los ataques en los términos más contundentes posibles. Hacemos un llamamiento a todas las partes en conflicto para que pongan fin a la violencia de inmediato y respeten sus obligaciones en virtud del Derecho Internacional», ha declarado Russell, quien ha subrayado que «los civiles, en particular los niños y niñas, nunca deben ser objetivo de ataques».
Además, ha señalado que «todas las presuntas violaciones deben investigarse de forma independiente y los responsables deben rendir cuentas». «No se puede tolerar la impunidad por violaciones del Derecho Internacional, especialmente cuando están en juego las vidas de niños y niñas», ha enfatizado.
«Extendemos nuestro más sentido pésame a las familias de las víctimas y a todas las personas afectadas por esta atroz violencia», ha precisado Russell, quien ha insistido en que «ningún niño debería sufrir jamás tales horrores». «La violencia contra los niños y niñas es inconcebible y debe acabar ya», ha concluido.
La guerra de Sudán, desencadenada en abril de 2023 por desacuerdos sobre la integración de las RSF en el Ejército sudanés tras el derrocamiento de Omar Hasán al Bashir en 2019, ha sumido al país en una severa crisis humanitaria, convirtiéndolo en el escenario de la mayor crisis de desplazados a nivel mundial.