Este viernes, las autoridades iraquíes han confirmado que los recientes ataques con drones a instalaciones militares en el país fueron perpetrados por un ‘único grupo’, aunque no se ha revelado la identidad de los responsables.
‘El comité de investigación ha confirmado que todos los drones suicidas utilizados en los ataques eran del mismo tipo, lo que indica que claramente el autor de los ataques ha sido un solo grupo’, indica un comunicado de la oficina del primer ministro distribuido en la plataforma X.
La investigación ha determinado que los drones llevaban cabezas de guerra de diferentes pesos y fueron construidos fuera de Irak, aunque los sitios de lanzamiento estaban dentro del país.
Se han identificado los grupos involucrados en la planificación y ejecución del ataque, así como se ha analizado los sistemas de control y comunicaciones usados, ‘lo que permitirá a las agencias de Inteligencia recopilar datos precisos que respaldarán los resultados de la investigación’.
‘Con base en lo anterior, la cúpula militar y de seguridad afirma que no tolerará ninguna amenaza que atente contra la seguridad de nuestras Fuerzas Armadas ni contra las capacidades del Estado iraquí. Se emprenderán acciones legales contra todos los implicados y serán remitidos a la Justicia’, prometió el comunicado.
Los ataques dirigidos a varias bases utilizaron drones suicidas que atacaron simultáneamente los sistemas de defensa. ‘Estos cobardes y agresivos ataques constituyen una flagrante violación de la soberanía nacional, y ninguna parte, interna o externa, podrá socavar la seguridad y estabilidad’, se añadió en el comunicado.
Los incidentes se produjeron en un contexto de alta tensión debido a la ofensiva de Israel contra Irán y la represalia iraní contra una base estadounidense en Qatar, todo como respuesta a los bombardeos de Washington a instalaciones nucleares iraníes.
El conflicto se intensificó el 13 de junio con la ofensiva israelí, seguida por ataques estadounidenses a instalaciones nucleares iraníes y un alto el fuego que comenzó el 24 de junio. Israel justificó su ofensiva como una medida contra un supuesto programa nuclear armamentístico de Irán, justo antes de una nueva ronda de negociaciones entre Irán y Estados Unidos.