El gobierno estadounidense ha tomado la decisión de cancelar los visados y denegar la entrada a un conjunto de individuos acusados de contribuir deliberadamente a la migración irregular procedente de México.
Este miércoles, el Departamento de Estado ha comunicado que la medida afecta a ‘ejecutivos y altos funcionarios de una empresa de transporte’ ubicada en México, aunque no ha detallado cuántas personas componen este grupo.
La autoridad diplomática de EE.UU. ha expuesto que estos individuos ‘organizaban el transporte de extranjeros, incluidos menores, desde el Caribe y otras regiones hasta puntos de tránsito en América Central, donde muchos fueron posteriormente interceptados cuando intentaban entrar ilegalmente en Estados Unidos’, una operación que llevaban a cabo ‘a sabiendas’.
El Departamento, liderado por Marco Rubio, ha reiterado que esta acción se justifica por las ‘graves consecuencias para la política exterior de Estados Unidos’ y ha reafirmado que ‘no tolerará acciones que socaven su seguridad nacional ni sus leyes de inmigración’.
